Tras perder a su señor, Lord Mifune, en las Guerras Civiles que cerraron el siglo XVI en Japón, Miyamoto Usagi es ahora un samurái sin amo ni clan, y recorre el peregrinaje del guerrero, siempre en busca de la armonía. Deambulando por el país, lucha contra la injusticia mientras pule sus habilidades espirituales y las marciales.

En este volumen, para resolver un doble asesinato en una posada de la carretera, Usagi se alía con uno de los invitados que prefieren los aficionados, el inspector Ishida; luego ayuda a un clan aliado a proteger su honor; y descubre que el negocio de la salsa de soja puede ser tan mortífero como sabroso.

También aparecen bastantes historias cortas de Usagi Yojimbo que provienen de una gran variedad de raras fuentes, junto con la historia «Doscientos Jizo» que celebra las doscientas apariciones consecutivas bajo el magistral lápiz de su creador, Stan Sakai.